Maldita sea mi desorganizacion, maldito sea vueling

Conociéndome como me conozco (más que nunca, menos que después) anoté en mi agenda la fecha y hora de partida de mi vuelo a Madrid. La noche anterior había terminado la maleta a eso de las 3:30 AM; al día siguiente, de acuerdo a lo planeado, fui a casa de una amiga a vaciar mis casi 10 gigas de fotos que una semana antes había metido en su lap. Todo iba muy bien. Para tener algo en que entretenerme mientras estaban listos mis dvds y como presintiendo un no se qué que que se yo, chequé por internet nuevamente la hora de partida...imaginen mi horror al comprobar que la salida era 1 hora antes de lo que tenía pensado...tenía que terminar esos malditos dvds por que mi amiga se iba a su país por un tiempo. Así que con el stress a tope quedaron listos a la 1:20 salí corriendo al piso -literalmente-, extrañamente el metro tardó más de lo normal en llegar, al llegar al piso aún tuve que terminar las maletas, llamé a un taxi y salí huyendo al aeropuerto, justo para llegar al mostrador 15 mins. antes del cierre. Una vez en la sala de espera con mi ritmo cardiaco un poco más normal, se nos informó que el vuelo tenía un retraso de 1 hora....ahora si que la madre que los parió.

Todo eso se olvidó una vez que pude reunirme en el hotel de Madrid con mis papás y mi tía...una cosa es cierta, la gente no cambia.